MIGUEL BOSÉ Y LA CENSURA DE LA DERECHONA

Miguel Bosé ha demostrado, una vez más, un enorme sentido común y y una gran valentía cuando, en la presentación en Madrid de su último disco "CARDIO" -precioso-, al ser preguntado acerca de la muerte de Zapata en Cuba, su respuesta ha sido de una sinceridad abrumable, al decir que en todos los países existe represión y censura, poniendo como ejemplo reciente la retirada de fotos del MuVIM por su relación con el caso Gürtel.

Han rechinado dientes peperos, y la lideresa ha manifestado, ¡cual escandalizada ella!, su total oposición al cantante, a la vez que ha sacado a colación a los representantes de la cultura, a los que despreciativamente ha nombrado como los de las cejas, acusándoles de que son unos comprados por el Gobierno socialista. Qué gran verdad es aquello de que piensa el ladrón que son todos de su misma condición.

La gallardía de Bosé le ha valido su censura en la localidad alicantina de Torrevieja, donde iba a actuar este verano. Otros municipios gobernados por el PP han anunciado ya vetar al cantante por sus críticas al funcionamiento censor del gobierno de Camps y sus adláteres. Ahora sus decisiones son descaradamente clonadas, todos estos peperos funcionan a toque de pito, incluso Rajoy obedece docilmente a su jefa, la lideresa. 

Ellos se lo pierden. Tener a Bosé en concierto es un lujazo, y nada va a perder él con estos vetos. Más bien al contrario: en cualquier lugar donde haya dos dedos de frente en la gente de  gobierno se lo van a rifar, pues es un pedazo de artista, y su popularidad va a ir in crescendo, si es que esto es posible -pues Miguel Bosé es un personaje consagrado-, con un sinfín de seguidores que auparán todavía más su fama y popularidad. Además de que las margaritas no se han hecho para los cerdos.

Torpeza semejante sucedió con las fotos del MuVIM, que, con su retirada ha producido un enorme eco del Gürtel, y de la forma de proceder de Alfonso Rus, al que han mandado callar desde "arriba" para no estropear más las cosas. Como es de imaginar los múltiples intereses creados entre ellos, Rus mantiene la boca cerrada, aguantando los sapos y culebras que vomitará en cuanto pueda, porque es su estilo, vulgar y ordinario.

Estas censuras son conocidas entre estos descendiente directos de la dictadura franquista, así también ha sido vetado en distintas ocasiones el actor igualmente alcoyano (como Román de la Calle), Xavi Castillo, y su popularidad en lugar de desmerecer se ha visto encumbrada.

Y es que este PP en nada se parece al Centro-Derecha europeo, civilizado, racional y con el que se puede llegar perfectamente a acuerdos. El PP español aglutina a toda la derecha, abundando lo más rancia de la misma, como hija rearmada y añorante del franquismo. Aliados también con Rouco y sus monseñores -tan lejos del espíritu abierto y conciliador del cardenal Tarancón- y dispuestos todos a derrocar el legítimo gobierno socialista y prestos al asalto al poder.

Y es que la derecha y la cultura están reñidas; es imposible su recociliación porque la cultura abre las mentes y hace más libres a los hombres. Y esta derecha, aglutinada en el PP, pretende la ignorancia de la ciudadanía española, para tenerla "opiada" y manipularla a su antojo.

No va a salirles bien la jugada. Son muchos los que no están dispuestos a dejarse manipular por aquellos que, en el fondo, los desprecian. Con ayuda de la Cultura, del sentido común y de la libertad, tan costosamente ganada, convenceremos y venceremos, como decía Unamuno, y nuestra democracia quedará mayormente consolidada.