ESPERPÉNTICAS "AYUDAS" AL CASO CAMPS Y A LA GÜRTEL
Justo ahora en que las encuestas llevan un tiempo manifestando una señalada diferencia en intención de votos a favor del PP, parece que sus dirigentes se muestran extrañamente nerviosos y entran, además de en contradicciones, en declaraciones varias de un contenido y una expresión de carácter esperpéntico.
El Comité Electoral Nacional no confirma a Camps como candidato a la Generalitat.
González Pons insta a la insumisión y sublevación del pueblo contra el Gobierno Socialista, tras un inadecuado parangón con el pueblo egipcio. Sin manos por Camps, y a la espera de que el aclamado sea él.
Rita Barberá a lo suyo, que es hacer ruido y meter bullas en asuntos muy serios, como es poner en tela de juicio el Estado Democrático al propagar sus burdas patrañas sobre la imparcialidad del Poder Judicial, -en especial, la Asociación Judicial Jueces para la Democracia (JpD), sin nombrar el resto de Asociaciones (APM a la que pertenecen De La Rúa y de Rosa), Francisco de Vitoria y FJI, quizá por su perfil mas conservador- uno de los tres pilares que sustenta al Estado desde Montesquieu. Quizá las declaraciones de doña Rita vengan también motivadas por el temor a cuando salgan ante la luz judicial los bolsos Vuitton con que el bigotes la obsequió. Lo peor no es que la señor Barberá vocifere improperios, sino que haya responsables del PP valenciano, como la alcaldesa de Torrent, Maria José Catalá, que consideren a este personaje de falla como su referente, y afirmen la infalibilidad de la alcaldesa de Valencia; quizá esté ahora en conexión directa con el espíritu santo.
La insistencia continuada en los faisanes, pidiendo a voz en grito la dimisión de Pérez Rubalcaba, Vicepresidente primero del gobierno y Ministro de Interior, bajo cuyo mandato se ha conseguido acorralar como nunca antes a ETA muestra el nerviosismo que corroe al PP. Incluso el opusdeista Juan Cotino, Vicepresidente del Consell, y con tan dudosas vinculaciones de las empresas de su familia con Gürtel y con Brugal, afirma -con absoluto olvido del pecado por mentir, injuriar y calumniar- que de los fondos reservados se pagó dinero a ETA, cuando el festín del faisán.
El diputado autonómico José Marí afirma que la multa que el fiscal anticorrupción solicita para Camps "condena a éste a la pobreza", pues las multas deben ajustarse al patrimonio y cargas familiares del condenado, y esta cantidad es el "doble de sus ingresos netos diarios".
El nazareno cartagenero, Trillo, coordinador de los casos judiciales del PP, viene a recordarnos la diferencia entre la responsabilidad política y la penal, tal olvidado él del Yak-42 y de las mentiras despiadadas a los familiares de las víctimas.
El nazareno cartagenero, Trillo, coordinador de los casos judiciales del PP, viene a recordarnos la diferencia entre la responsabilidad política y la penal, tal olvidado él del Yak-42 y de las mentiras despiadadas a los familiares de las víctimas.
Mientras, tras la reunión relámpago del Comité Provincial, Camps-napoleón se autoproclama candidato a la presidencia de la Generalitat. Camps el presidente con más apoyos del mundo mundial y que habla a diario con Rajoy- Presidente, que lo llama a él Paco, nunca Francisco.
Rajoy, una vez más, no sabe, no contesta. Y no es que no participase de los viajes y juergas dirigidos por Pedro García, exdirector general de RTVV, tan gürtelianamente unido al Bigotes cuando la visita papal, en julio de 2006. Tan gustosamente participativo este Rajoy en todos los actos festivos montados por el responsable del caso Palma Arena, Jaume Matas, Presidente de Baleares y Ministro en la era aznariana, lo mismito que el propio Rajoy. Amiguísimo de Bárcenas, tesorero del PP. De los hilillos de plastilina-gürteliana no puede despegarse, al igual que del chapapote. La situación del presidente del PP es una paradoja, sin salida por ningún lado: o conocía desde un principio todo lo relativo a la trama Gürtel y calló, con lo que sería cómplice, o no se enteró de nada, con lo cual quedaría inhabilitado para presidenciable de España por ser solemnemente bobo e incapaz.
Pero la guinda al pastel de Camps la pone el inigualable Presidente provincial del PP, Presidente de la Diputación valenciana y alcalde Xàtiva, Alfonso Rus. De este personaje sólo se pueden trasladar aquí sus palabras, y es una pena, porque perdemos buena parte del show. De Rus, cuando habla, no sólo son llamativas sus palabras, sino que podemos deleitarnos con su voz y disfrutar con sus gestos. Es único.
Levante-EMV recoge lo siguiente: "Cuando a Rajoy le faltó la peseta para el duro, el primero que la puso fue Paco Camps. Rajoy no es tonto, es persona y cree en la honestidad de Camps". ¿Entienden la contraposición de 'tonto' con 'persona'? Pues Rus, sí.
Levante-EMV recoge lo siguiente: "Cuando a Rajoy le faltó la peseta para el duro, el primero que la puso fue Paco Camps. Rajoy no es tonto, es persona y cree en la honestidad de Camps". ¿Entienden la contraposición de 'tonto' con 'persona'? Pues Rus, sí.
Y sigue: "Mariano Rajoy es mi padrino político, entré en el PP de su mano, y hablo mucho con él. Nunca le he oído decir que Paco no será el candidato. Nunca. Ni una vez". Seguro que el periódico que he citado tendrá en su hemeroteca las palabras de un Rajoy sorprendido ante las sandeces de un personajillo en sus primeros pasos por Valencia: '¿Quién es éste?'
Y Rus sigue: "En el partido, alguno no estará de acuerdo, eso siempre pasa, traidores siempre hay, pero nadie ha dicho que el candidato no será Paco". Además Rus es comprensivo con que desde Madrid no sean efusivos en su apoyo a Camps, y lo explica de manera diáfana: "No hace falta decirle a tu mujer todos los días te quiero, y si se lo dices seguro que es porque tienes una novia". Así es Alfonso Rus.
Si con todo ello, la ciudadanía sigue otorgando su confianza a este partido depredador, no nos queda otra solución más que mirarnos nosotros mismos también en los espejos cóncavos del Callejón del Gato e intentar subsistir en medio de esta deformación de una sociedad absurda, deforme y surrealista, más cercana y permisiva cada día con esta subversión de valores de la que Berlusconi es líder.
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