CASO PP (GÜRTEL) Y CORTINAS DE HUMO

Ayer se hizo público el levantamiento de los sesenta tomos que encierran casi el resto del caso Gürtel, y una de las tretas preparadas por el PP  ha sido el intento de desviar la atención de la ciudadanía hacia otros temas, y así evitar que se hablase sólo de los imputadísimos de la trama corrupta.

Se han servido de la chiquilla de Seseña, presuntamente asesinada  de forma brutal por una compañera de estudios, para volver a poner en primer plano el tema de la necesidad del endurecimiento de las penas.

En Valencia, su alcaldesa, la señor Barberá, ha aprovechado la entrada en vigor de la ley autonómica que avala el plan de reforma del barrio de El Cabanyal (PEPRI), y pese a la orden ministerial, a las ocho de la mañana  distintos tipos de maquinaria han derribado cinco casas de esta zona, frente a la oposición vecinal -arrastrada por la policía  como en tiempos dictatoriales- y la presencia de distintos representantes políticos, que también han intentado paralizar el derribo. Se han presentado denuncias, tanto por lesiones, como para exigir  la rápida paralización de esta brutal agresión a este barrio, cuyo desenlace está pendiente del Tribunal Constitucional.  Pero, además de salirse con la suya en el derribo de estas casas, se ha conseguido que España entera supiera de este hecho brutal, lo comentara y así restar tiempo para hablar  de la implicación de Camps y familia, Ricardo Costa, Juan Cotino -el opusiano de misa diaria-, Gerardo Camps...en la trama corrupta de Correa y El Bigotes, y de la presunta financiación del PP de forma totalmente ilegal. 

De la Rúa, el más que amigo de Camps, desestimó estos hechos, echándolos al olvido (para eso están los amigos), pero, tras la denuncia del PSPV-PSOE, el juez Pedreira los retomó,  y deja bien clara la peligrosa relación. Tampoco debe ser éste un buen momento para el juez De la Rúa, cuya "independencia profesional" está probadamente  desprestigiada.

Los del PP que se han atrevido a hablar acerca del "destape gürteliano" no han dicho más que sandeces, que vienen repitiendo goebbselianamente desde hace tiempo, echando balones fuera, e intentando quitar hierro al asunto sin conseguirlo. Rajoy sigue callado. Y el que calla otorga. Su apoyo a Bárcenas, por defecto, se mantiene. Pero no sólo tiene que responder por Bárcenas; también por su querido Paco, al que prometió estar delante, al lado, detrás de él, marcando el paso de una presunta yenca. Y además,  su querido Jaume Matas le espera, es casi tan intimo de Rajoy, como de Zaplana (otro pajarito que "pía" demasiado alto). Y ahora, el presidente del PP no puede hacerse el olvidadizo, su memoria puede "fallarle", pero la nuestra, la de todos los españoles que deseamos seguir creyendo en la Democracia, sigue intacta y exigimos las responsabilidades correspondientes, que no son pocas.

Y es que el PP y Rajoy, en especial, están touchés.

(Continuará....)


Comentarios

Entradas populares